La ley de los topes


1 Samuel 9:1-2 
        En la tribu de Benjamín había un hombre llamado Quis, que era hijo de Abiel y nieto de Seror; su bisabuelo había sido Becorat, hijo de Afíah. Quis, hombre muy respetado, tenía un hijo, joven y bien parecido, que se llamaba Saúl. No había otro israelita tan bien parecido como él, pues en estatura ninguno le pasaba del hombro.
Para alcanzar las más elevados niveles de eficiencia, tienes que superar el tope de tu capacidad. Suele ser que el tope más complicado a vencer o superar, eres tú mismo. No podemos avanzar si no sosmos capaces de susperar aquello que nos limita e impide avanzar para lograr tus sueños o proyectos. Nadie que no pudo vencer a sus topes logró alcanzar o realizar aquello para lo cual estuvo p está en esta tierra.
         El contexto de nuestra cita bíblica nos muestra el cuadro de cuando el pueblo pide a un rey, y ante su petición, Dios les da a Saúl como tal. El pueblo miró su apariencia exterior, mientras que Dios miró su corazón. Saúl mismo se desacreditó como líder/rey, y eso hizo que Dios designara un nuevo líder en su lugar:  a David, un hombre conforme al corazón de Dios.
        Mientras David trató de ser un mejor líder elevando su nivel para superar sus topes; la actitud de Saúl mantuvo el tope de su liderazgo lleno de espasmos que le limitaron.
       Cuadro comparativo de Saúl y David  en cuanto a unción y  oportunidades que a ambos se le otorgaron: Ambos fueron ungidos por Samuel. Ambos recibieron consejos por el mismo profeta. Tanto  Saúl como David enfrentaron topes. Ambos escucharon el desafío que lanzaba Goliat en contra de todo Israel Ambos tuvieron errores, Saúl al ofrecer un holocausto a Dios que no le correspondía y David al haber adulterado con Betsabé
¿Qué es lo que marcó la diferencia en estos liderazgos? Sin duda alguna fu su actitud con que enfrentaron la circunstancias, al final, fue esto lo que marcó la diferencia. Saúl nunca entendió la naturaleza de su liderazgo. El día que fue instituido como rey, se escondió de la gente. Lo anterior fue una muestra de reconocer su incapacidad de dirigir. Aunque tenía el título, el poder y la corona de un rey, nunca llevó la monarquía más allá de un gobierno regido por su carismátismo. Fue hecho general, pero nunca logró reunir a un ejército estable y fuerte para la batalla. Nunca creó un gobierno organizado para preservar sus logros. En lugar de usar su armadura para enfrentar a Goliat, la ofreció David. Saúl decidió esperar para ver qué ocurriría, en lugar de levantarse y enfrentar el desafío. Ante el error de levantar holocausto indebido, nunca tuvo una reacción de arrepentimiento.
       En cambio,  David trató de ser un mejor líder y buscó la manera de elevar el nivel de su liderazgo para superar sus topes. David siempre aprovechó las oportunidades para crecer en su liderazgo Aprendió a ser un guerrero. Levantó un ejército permanente que vencía a sus enemigos. Organizó un gobierno duradero. Desde antes de su reinado, David se estaba preparando para algo grande. Desde el comienzo de su reinado, lo amó todo el pueblo de Israel y Judá (I Samuel 18:16 LBLA) Pero todo Israel y Judá amaba a David, porque él salía y entraba delante de ellos. Ante el pecado, David reaccionó de manera diferente: Al ser confrontado por Natán, él se arrepintió sintiendo un agudo pesar. David nunca tuvo miedo de reconocer sus fracasos, de pedir perdón a Dios y de mejorar en todas las áreas de su vida. David supo superar los topes de su vida y liderazgo… y pudo pasar a otro nivel

CONCLUSIONES
La mayoría de los topes de Saúl tenían que ver con la debilidad de su carácter. Desafortunadamente estaba más preocupado en guardar las apariencias que en fortalecer su carácter (I Samuel 15:30 DHH)  Yo he pecado —repitió Saúl—. Pero te ruego que ante los ancianos de Israel y ante todo el pueblo me sigas respetando como rey. Así que vuelve conmigo para adorar al Señor tu Dios.
Entendemos que los topes en la vida te pueden limitar o inspirar, eso dependerá de la actitud que tomes a la hora de cruzarlos.
El asunto no es saber si tienes o no topes, lo importante es saber que va a hacer con ellos.
Tanto Saúl como David tuvieron topes en su vida y en su liderazgo, la diferencia la marcó David teniendo pericia y determinación para no dejarse vencer por ellos.
     
 REFLEXION
1.     En tu propia vida y cosas que presides, ¿Has sido cómo Saúl o como David?
2.     Todos tenemos topes en la vida al igual que Saúl y David, ¿Qué áreas de tu vida deben ser perfeccionadas para superar los topes de tu existencia?
3.     David determinó tener una actitud correcta sumada a la pericia y determinación para no sucumbir ante los topes que salieron en su camino, ¿tu Actitud es la adecuada en el momento de enfrentar las circunstancias adversas en tu vida y liderazgo?

4.     Todos concordamos en que Saúl no supo superar los topes en su senda, ¿Qué consejo darías a alguien que desarrolla un liderazgo como el de Saúl?

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