Aprendamos de la experiencia


1 Corintios 10:6
Estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, a fin de que no codiciemos lo malo, como ellos lo codiciaron

Estoy seguro de que más de una persona nos ha querido enseñar algo a través de su experiencia. Pero muchos optan por hacer válido el refrán que dice: “nadie experimenta en cabeza ajena”. Esto nos da a entender que nadie quiere aprender a través de otros que ya vivieron aquello que nos recomiendan no experimentar. Y por no hacer caso a la voz de la experiencia, las personas se meten en muchos problemas que se pudieron evitar si se hubiese atendido al consejo.
El paso de los años te permite adquirir cierta pericia que quisieras compartir en los niños, adolescentes y jóvenes. Uno anhela que ellos no tuviesen que atravesar por aquello que nosotros como adultos tuvimos que vivir por no atender  a los consejos de nuestros mayores, de nuestros maestros o de nuestros padres.
En 1 Corintios 10:1-12, el apóstol Pablo hace un resumen de todo aquello que vivieron sus padres en el desierto para que las nuevas generaciones no vivan lo que sus antepasados hicieron por causa de su desobediencia.  Pablo les daba a entender: aprendan de la experiencia de nuestros antepasados para que no cometan los mismos errores.
Como me gustaría que volvieran los tiempos de Job, en los que él se sentaba en las plazas y los muchachos llegaban con él para escuchar de su sabiduría. Ellos querían ser instruidos a través de la experiencia de un hombre de Dios. Qué hermoso sería ver a  los padres sentarse para dar instrucción y formación a sus hijos. Qué lindo fuera el ver a nuestros jóvenes atendiendo al consejo de sus mayores y de sus padres y no mirarlos metidos en los vicios, en la rebeldía o haciendo cosas en contra de lo establecido por la Palabra de Dios.
Estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, a fin de que no codiciemos lo malo. Nuestra experiencia como adultos debe de ayudar para que los niños, adolescentes y jóvenes no codicien lo malo.  La experiencia de los adultos debe de ser tomado en cuenta para la gente de menor edad y ser aprovechada para no caer en errores que pueden originar estragos en sus vidas mismas.
En el v. 11 Pablo vuelve a indicar el siguiente: “y estas cosas acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros…”1 ¿Qué cosas tenemos que atender en la amonestación hecha por el apóstol?
Evitar aquello que desagrada a Dios, por lo que muchos quedaron postrados en el desierto, y que puede hacer que hoy en día nuestra vida espiritual pueda morir también. No ser idolatras, como algunos de ellos. No fornicar, como algunos de ellos fornicaron, y cayeron en un día veintitrés mil. No tentar al Señor, como algunos de ellos le tentaron y perecieron por las serpientes. No murmurar, como algunos de ellos murmuraron, y perecieron por el destructor.
La encomienda es clara: aprendamos de la experiencia de nuestros adultos, atendamos a las recomendaciones de nuestrso maestros o tutores, obedezcamos y hagamos nuestros los consejos de nuestros padres, busquemos consejería con nuestros pastores. Vivamos una vida con menos complicaciones a través de la experiencia de los demás.

            CONCLUSIONES
Tu experiencia puede ser vital para que tus hijos no caigan en errores o en cosas que desagradan a Dios.

La experiencia sumada a la obediencia en Dios, es la mejor fórmula para ayudar a aquellos que necesitan ser aconsejados.

Es mejor escuchar el consejo del sabio, que experimentar estragos sobre tu propia cabeza por causa de tu necedad.

Los reyes siempre estaban rodeados de consejeros para ejercer bien su autoridad. Como joven o adolescente busca el consejo de las personas con experiencia y que vivan bajo la voluntad de Dios, esto te evitará muchos problemas en la vida.

            REFLEXION
1.     El camino del necio es recto a sus propios ojos, mas el que escucha consejos es sabio, ¿estás buscando el consejo sabio o estás viviendo en tus propias necedades?
2.     Escucha el consejo y acepta la corrección, para que seas sabio el resto de tus días, ¿estás dispuesto a escuchar el consejo de Dios a través de tus padres y pastores?
3.     El sabio no dice nunca todo lo que piensa, pero siempre piensa todo lo que dice, como persona adulta y de experiencia, ¿desarrollas bien tu papel de consejero para ayudar a tus hij@s? ¿Tu experiencia está acorde con tu obediencia?

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   Pastor Oscar
   Correo: oscarhp07@hotmail.com
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