Días difíciles requieren decisiones de fe

Job 23:8-9

Pero busco a Dios en el oriente, y no está allí;lo busco en el occidente, y no lo encuentro.Me dirijo al norte, y no lo veo; me vuelvo al sur, y no lo percibo.

Resulta sencillo percibir que Job había perdido la brújula que podía indicarle y a la vez ubicarlo en la Presencia de Dios. A todos de alguna manera suele pasarnos lo mismo en algún momento de nuestra vida,  se siente la sensación de perder la dirección de nuestra antena parabólica con el satélite de Dios. Job había pasado por situaciones muy complicadas, mismas que pudieron originar en él  una incertidumbre, desesperación, dolor, angustia, desolación, sufrimiento, alejamiento, etc.   Cuando alguien está inmerso en este tipo de situaciones, suele experimentar un descontrol espiritual.

Tengo presente el día en que falleció mi hermano José. Ocho años antes, mi mamá había sanado de un cáncer terminal, pero no fue suficiente como para que su vida y la de nosotros como sus hijos buscáramos de la Presencia de Dios. Cuando llegó este suceso a la familia, fue como haber recibido una bomba que vino a destrozar muchas cosas, principalmente nuestra estabilidad emocional. Hubo un descontrol total, queríamos que alguien nos explicara lo sucedido, en lo personal me quede como ido, no lo quería creer y tampoco entender, se trataba del hermano con el que yo convivía más, lo había visto una semana atrás en el hospital, nunca creí que jamás lo volvería a ver con vida. En el tiempo que estuvo su cuerpo en casa, no quise acercarme a verlo ni a tocarlo, tomé la decisión de recordarlo vivo, como él era. En ese entonces no sabíamos mucho acerca de Dios, ni teníamos a un guía espiritual que viniera a dar consuelo a través de la Palabra. Yo puedo entender a Job cuando dijo: Pero busco a Dios en el oriente, y no está allí; lo busco en el occidente, y no lo encuentro. Me dirijo al norte, y no lo veo; me vuelvo al sur, y no lo percibo.

Uno de mis versículos favoritos es exactamente el que está después de esta declaración que había hecho Job. Es el v. 10 que dice: Sin embargo, él sabe a dónde yo voy; y cuando me ponga a prueba, saldré tan puro como el oro. Aquí es cuando comprendes que los momentos difíciles requieren decisiones de fe.

Es cuando percibes que la Presencia de Dios está cerca de ti. Que aunque te sientas extraviado por lo que estés pasando, Dios no te ha perdido de su mirada. Que es probable que no entiendas la razón por la que te sientas como un Job; pero la promesa es de que lo entenderás mañana.

Después de algunos meses mi familia y yo llegamos al punto de comprender el propósito de lo que sufrimos  a causa de la muerte de mi hermano: mi mamá tomó la firme decisión de entregarse por completo al Señor Jesucristo. Abrió las puertas de la casa para que nuestro pastor nos diera seguimiento en la Palabra de Dios. Dos años después mis hermanas y yo consagramos nuestras vidas. Aprendimos a amar, obedecer y servir a nuestro Señor en Su Iglesia. Hemos sido una familia con un legado de bendición. Dios ha usado nuestras vidas para bendecir a cientos de personas. Actualmente Papá Dios me usa como pastor de una de las Iglesias más grandes y hermosas de mi ciudad. Mis hijos se están levantando con un ministerio lleno de poder y autoridad.

CONCLUSIONES

Se perfectamente que cuando alguien pasa por una prueba, Dios está igual de cerca que en cualquier otra circunstancia de su vida.

Dios usa las pruebas o los momentos difíciles para cumplir su voluntad, la cual es justa, santa y perfecta.

Que las tristezas y desolaciones pueden llegar con la noche, pero el gozo y la esperanza vienen con el amanecer.

Que en situaciones complicadas, es el mejor momento para aferrarnos en todo lo que sabemos de Dios.

Que cuando todo a tu alrededor haga que tu alma desfallezca, Dios siempre será la esperanza para permanecer firmes y salir avantes de la tormenta.

 La adversidad y las pruebas solamente les proporcionarán la oportunidad de mostrar la sinceridad de su fe y amor.

            REFLEXION

1.     Muchas veces las circunstancias por las que pasamos nos hacen sentir que perdemos el rumbo en nuestra vida espiritual, ¿cómo está tu condición y posición dentro del plano espiritual?

2.     Job después de un desconcierto en su vida logró restablecer su posición e identidad delante de Dios al declarar: Sin embargo, él sabe a dónde yo voy; y cuando me ponga a prueba, saldré tan puro como el oro, ¿cómo estás enfrentando tus pruebas? ¿La Palabra y el Espíritu Santo están dando orientación a tu vida espiritual?

3.     Hay cosas que no se entienden cuando uno está en medio de la tormenta o de la prueba; pero la promesa es de que lo entenderemos después, ¿muestras paciencia para esperar la ayuda de Dios?

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    Pastor Oscar

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