Ni un paso atrás
Josué 10:25
Entonces Josué les dijo: «No teman ni den un paso atrás; al
contrario, sean fuertes y valientes. Esto es exactamente lo que el Señor hará
con todos los que ustedes enfrenten en batalla»
Muchos en la vida pueden hablar de su huida
ante un momento complicado en el que no pudieron avanzar, o quizás de aquello
en lo que no lograron terminar en el estudio, trabajo o proyecto. Este tipo de
personas tendrán un agudo nudo en la garganta que les impedirá proclamar
victoria o satisfacción de algún logro que se truncó por no haber mantenido el
paso firme y decido para avanzar.
El día de hoy, nuestro tema es de suma
inspiración a través de la vida de Josué que había quedado al frente después de
la muerte de Moisés para continuar con la conquista de la Tierra Prometida. En
todo este capítulo nos narra en cómo iba conquistando ciudad tras ciudad, en
específico nos señala la victoria sobre los cinco reyes amorreos: Jerusalén,
Hebrón, Jarmut, Laquis y Eglón. Josué motivado por el Dios Todopoderoso,
declara sobre su ejército y en los comandantes que lo había acompañado que no
temieran ni dieran un paso atrás; por el contrario que mostraran fortaleza y
valentía para terminar con la conquista sobre estos reyes.
Ni un paso atrás debiese ser la encomienda
para todo aquel que anhela tener avances significativos en su vida; ni un paso
atrás es la orden para aquellos que buscan hacer algo más que los demás; ni un
paso atrás es el encargo para los que están enlistados en el ejército del Señor
al momento de enfrentar a las huestes de maldad; ni un paso atrás es el mandato
para no desistir ante un momento de prueba o aflicción; ni un paso atrás es el
mandamiento para no flaquear cuando se debe de conquistar; ni un paso atrás es
la comisión para aquellos que son valientes y no cobardes.
Considero que el lema de Josué como líder del
ejército Israelí fue: ¡retroceder nunca, rendirse jamás! La vida misma de todo
ser humano es una intensa batalla en donde no tenemos que dar pasos hacia atrás
en los momentos cumbres en nuestra existencia, y menos sentirnos derrotados
cuando todavía tenemos fuerzas para seguir al frente de la lucha.
Al igual que Josué, tu y yo tenemos en el
Eterno al noble sostén, a la fuente bendita, al refugio seguro que nos inspira
a soportar los embates del enemigo y a dar pasos de fe para hacerlos retroceder.
Tenemos
dones, capacidades, habilidades y talentos que Dios nos ha dado de manera única
para impactar a nuestros puestos de trabajo, comunidades, naciones y al mundo
entero. ¡No te rindas! ¡Sigue Luchando! La Palabra nos inspira: Por eso me armo de valor, y me digo a mí mismo: Pon tu confianza
en Dios. ¡Sí, pon tu confianza en él!1. Esta es
la base para no vencernos y retroceder ante cualquier situación que tengamos
que enfrentar en la vida. Josué fue un impulsor de fe y confianza para con su
ejército y capitanes del mismo. Tu vida y la mía deben de ser canales por donde
fluyan estas cualidades que inspiren a otros a continuar en la batalla hasta
lograr la victoria. Y nunca olvides que la fe
que tienes es revelada cuando eres probado, es decir, el tamaño de tu fe
determina el tamaño de tu resistencia para seguir avanzando.
CONCLUSIONES
Si no puedes volar, entonces corre. Si no puedes
correr, entonces camina. Si no puedes caminar, entonces arrástrate. Pero sea lo
que hagas, sigue moviéndote hacia delante.
La vida es como montar en bicicleta, si quieres
mantener el equilibrio, tienes que seguir avanzando.
No te rindas que la vida es eso, continuar el viaje,
perseguir tus sueños, destrabar el tiempo, correr los escombros, y destapar el
cielo.
El triunfo no está en vencer siempre, sino en nunca
rendirse.
REFLEXION
1.
No teman, ni den
un paso atrás, fue la orden de Josué a su ejército, ¿consideras que esta orden puede ser
aplicada a tu vida a partir de hoy?
2.
No se debe dar un
pasa hacia atrás ni para tomar impulso, ¿estás consiente de que eres llamado
a estar firme y avanzando hacia la conquista de tus ideales?
3.
Ni un
paso atrás debiese ser la encomienda para todo aquel que anhela tener avances
significativos en su vida, ¿tienes en claro que
puedes perder alguna batalla, pero jamás rendirte?
4. No te rindas, sigue luchando!, ¿estás listo para continuar el viaje en tu vida?
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Pastor Oscar
Correo: oscarhp07@hotmail.com
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