Los procesos son útiles


       Daniel 6:13-16
            Entonces le dijeron al rey: —Ese hombre Daniel, uno de los cautivos de Judá, no hace caso a usted ni a su ley. Sigue orando a su Dios tres veces al día.
Al oír esto, el rey se angustió mucho y procuró encontrar un modo de salvar a Daniel. Pasó el resto del día buscando una manera de librarlo de ese aprieto.
Por la noche, los hombres volvieron a presentarse ante el rey y dijeron: «Su Majestad, usted sabe que según las leyes de los medos y los persas, ninguna ley firmada por el rey puede ser modificada».
Entonces, finalmente el rey ordenó que arrestaran a Daniel y lo arrojaran al foso de los leones. El rey le dijo: «Que tu Dios, a quien sirves tan fielmente, te rescate.

Al igual que Daniel, hubo otros hombres que tuvieron que pasar por procesos en donde experimentaron el estar dentro de un proceso llamado: foso, cisterna, cueva, gran pez, sepulcro, etc. Cada uno de ellos tuvo una razón por la cual llegó allí, por ejemplo: Daniel, estuvo en el foso de los leones por causa de una aparente desobediencia al edicto del rey que indicaba que  durante los próximos treinta días, todo aquel que orara a quien sea, divino o humano —excepto a él, como su Majestad—, sería arrojado al foso de los leones. Pero como Daniel oraba tres veces al día al Dios Eterno, entonces fue acusado ante el rey y echado al foso de los leones. Sin duda alguna podemos encontrar varias enseñanzas en cuanto al proceso de este varón:
·      Aunque sabía que podía enfrentar riesgos y peligros al desobedecer el edicto del rey, prefirió su obediencia al Dios Todopoderoso.
·      Nunca dejó de hacer lo que habituaba día con día, la de orar tres veces al día.
·      Marcó una notada dependencia hacia el Eterno, pues solo él podía salvarlo de unos leones hambrientos.
·      No intentó salir del foso, sino esperó pacientemente hasta que se cumpliera el tiempo de su proceso.
·      Al salir ileso de en medio de los leones, glorificó a Dios en su vida y dio testimonio de la grandeza de Él delante del rey y de los que deseaban su mal.
Daniel nos alecciona en que los procesos son necesarios en nuestra existencia. Este profeta no oró para que no entrara en el foso de los leones, sino para que fuera guardado en integridad mientras duraba su prueba. Me pongo a meditar en el por qué  un hombre como Daniel, tan entregado, con una integridad inigualable, sabio y además profeta, tuvo que ser llevado a un proceso como el que describe este capítulo seis. ¿Qué le había falta perfeccionar en su vida? ¿Qué quería enseñarle el Eterno en medio de esta situación?
Puedo deducir al conocer esta historia real de Daniel, que Dios sabe perfectamente lo que quiere pulir y mejorar en nuestras vidas y ministerios. Que como Soberano, tiene la autoridad para meternos en aquellos procesos que nos forjan y desafían en nuestra fe y obediencia. Que en todo proceso, aunque difícil y complicado para nuestras vidas, podemos llegar a experimentar la protección del Señor y  estar en un ambiente en donde lo sobrenatural nos inundará para salir abantes y victoriosos.
Pablo dijo: Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito1, por lo tanto, declaramos que todo proceso en nuestras vidas son un bien para nuestra mejora, ¿puedes creerlo y aceptarlo?

      CONCLUSIONES
Los retos hacen que la vida sea interesante, superarlos hace que la vida tenga propósito.

Todo proceso por difícil que sea para tu vida, es lo único que te llevara al crecimiento y a la madurez.

Si has sido capaz de llegar hasta el punto en donde te encuentras, serás apto de seguir adelante en tu proceso.

Cuando menos lo esperamos  la vida nos coloca dentro de un proceso que pondrá a prueba nuestro coraje y nuestra dependencia hacia el Eterno.

            REFLEXION
1.     Al igual que Daniel, hubo otros hombres que tuvieron que pasar por procesos en donde experimentaron el estar dentro de un proceso, ¿estás enfrentando un desafío en tu vida? ¿qué actitud estás teniendo en medio de él?
2.     Cada proceso tiene una razón para cada individuo que es adentrado en él, ¿en tus procesos has encontrado el propósito de Dios en tu existencia?
3.     Daniel aunque sabía que podía enfrentar riesgos y peligros al desobedecer el edicto del rey, prefirió su obediencia al Dios Todopoderoso, ¿será tu desafío este ejemplo de Daniel? ¿te comprometes a obedecer al Eterno por sobre todas las cosas?
4.     Dios como Soberano, tiene la autoridad para meternos en aquellos procesos que nos forjan y desafían en nuestra fe y obediencia, ¿estás consciente de este Principio?

1Romanos 8:28

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  pastor Oscar
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