Gratitud
Salmo 7:17
Daré
gracias al SEÑOR conforme a su justicia, y cantaré alabanzas al nombre del
SEÑOR, el Altísimo.
La Palabra nos enseña que debemos de dar GRACIAS a Dios en
todo. Y todo en cualquier idioma significa TODO. El espíritu de agradecimiento
pareciera manifestarse solo en aquellas cosas o momentos en donde nos sentimos
bien, cuando hay salud, estímulos económicos, noticias agradables, sucesos
sobresalientes para nuestras vidas, etc., pero se rehúye a dar gracias por los
momentos difíciles, en medio de la enfermedad, en procesos dolorosos, en
tiempos de escasez o pruebas diversas
Hoy
aprendemos que debemos de dar GRACIAS en todo y conforme a la Justicia de
nuestro Dios. Todo lo que hemos o estemos pasando está dentro del marco de la
Justicia Divina. No podemos emitir juicios, reclamos o exclamaciones contrarias
a la Justicia de Dios. Él siempre trabaja para nuestro bien, y los que le
amamos debemos de entender que si es un bien, entonces debemos de agradecerlo.
En Job 2:8-10 encontramos lo
siguiente: Y Job tomó un tiesto para rascarse mientras estaba sentado entre
las cenizas. Entonces su mujer le dijo: ¿Aún conservas tu integridad? Maldice a
Dios y muérete. Pero él le dijo: Como habla cualquier mujer necia, has hablado.
¿Aceptaremos el bien de Dios y no aceptaremos el mal? En todo esto Job no pecó
con sus labios.
Dar gracias a Dios en todo
y siempre, evitará que nuestros labios emitan pecado. Cuando somos agradecidos
aprendemos a vivir en plena satisfacción, y a la vez con seguridad, pues
sabemos que los que amamos a Dios, todas las cosas nos ayudan a bien, esto es,
a los que conforme a su propósito son llamados.
Aprender a dar gracias a
Dios por lo que él nos ha dado es una parte importante de nuestro viaje
espiritual. Saber discernir
en el Espíritu las circunstancias que vivimos, nos permitirá tener confianza y
seguridad de que Dios las permite para un bien. Las palabras de gratitud siempre serán motivos de
alabanza que alegrarán nuestro corazón y serán gratas delante de nuestro Dios. Aunque
muchos emitan blasfemias, reclamos o cosas semejantes en contra de Dios,
nosotros como cristianos hemos de mantener la postura de un adorador que
expresa cánticos de gratitud al Rey.
Es
ser agradecido hará que en nuestras vidas fluya paz, armonía y felicidad por
todo aquello que recibimos de parte de nuestro Dios, y aún por lo que todavía
no hemos recibido. La gratitud siempre atraerá un semblante inmejorable en
nuestros rostros como fruto del corazón que reconoce y agradece las bondades del
Eterno en su existencia.
CONCLUSIONES
Gracias por un minuto, una hora, un día o una semana
de vida. Gracias por permitirme ser feliz al lado de los que quiero y por
permitirme verlos sonreír una vez más.
Por cada vez que regreso a casa, por cada vez que
abrazo a mis hermanos y por cada vez que comprendo que una pelea no soluciona
nada, te agradezco. Gracias por cuidarme e iluminar mi vida y mis pensamientos.
Hoy y todos los días son buenos para agradecer por
la vida a Dios. Por hoy y por todos los días que tenemos la oportunidad de
abrir una vez más los ojos y de sentir los rayos del sol, te agradezco Señor.
Por las personas que me dejaron buenos momentos y
por las personas que solo dejaron heridas, te agradezco porque de todas ellas
he aprendido una lección.
REFLEXION
1. Tener
un corazón agradecido nos permite reconocer la bondad de Dios sobre nosotros, ¿estás
batallando en asimilar las cosas que estás viviendo y que no te permite ser
agradecido para con Dios?
2. Dar gracias en todo y
siempre es lo que debe de distinguirnos como hijos de Dios, ¿te
cuesta trabajo ser agradecido con Dios y con las personas que te rodean?
3. Cada
momento y circunstancia nos permiten elevar palabras de gratitud y a la vez nos
evita
emitir palabras que no son gratas delante de Dios, ¿estarás listo para cambiar esas
palabras de reclamo, de enojo, de molestia, etc., por palabras de acción de
gracias?
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Pastor Oscar
Correo: oscarhp07@hotmail.com
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